La serenidad en la familia
La serenidad en la familia
Cuando los integrantes de una familia se mantienen realmente serenos, lo han logrado porque juntos se han ido educando para reaccionar siempre con base a actitudes positivas aun cuando las circunstancias sean muy problemáticas o demasiado desagradables.
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La serenidad en los padres:
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Una madre o un padre sereno, podrá desarrollar una mejor capacidad para comprender su participación en todos los aspectos que constituyen a su familia. Desde el cuidado de la relación con su pareja, la correcta y comprometida educación de los hijos, hasta el respeto a la individualidad de todos sus familiares.
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Serenos tomarán con real interés todas las responsabilidades que como cabezas de familia vayan adquiriendo a través del tiempo, enfrentando y resolviendo cada uno de los problemas personales y comunes a la familia, siendo concientes que de las decisiones que tomen, dependerá la sana convivencia entre todos sus miembros cercanos y lejanos.
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Serenos se darán cuenta que sus hijos tomarán como ejemplo y modelo todas sus actitudes y conductas, situación que los motivará a ir mejorando con el tiempo por el sincero interés de proporcionarles a sus hijos mejores herramientas de desempeño y con esto estarán formando inicialmente su carácter para desenvolverse después en la sociedad.
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Para unos padres serenos, la familia no es un gran problema, para unos padres realmente serenos, la familia representa la oportunidad de hacerse personas mas eficientes y útiles para los demás, ya que cómo ellos mismos y sus hijos se comporten en sociedad, ha sido la forma en cómo se han venido comportando en familia.
La serenidad en los hijos:
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Hijos serenos son el producto de una crianza responsable, cuyos padres siempre se preocuparon por educar a sus hijos a través de su ejemplo y proporcionándoles sus experiencias para formarlos de la mejor manera.
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Un hijo sereno ha ido aprendiendo en cada etapa de su vida a resolver eficientemente sus problemas, contando generalmente para esto con la ayuda experimentada de sus padres. Confiado, el hijo cuando se ha dedicado a aprender de sus padres la experiencia de aceptar tolerantemente sus errores, desarrolla también la capacidad de aprender del error, formar su propia experiencia, aprender del error y evitar volver a equivocarse.
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Un hijo sereno, al estar constantemente en contacto con la realidad, ubica con claridad su papel en la familia, valorando, respetando y sobre todo, siguiendo el ejemplo de sus padres, lo que le permitirá corresponder con el mismo compromiso a mantener la unidad familiar, colaborando con todas aquellas actividades que permitan una mejor convivencia. Siempre contará con la suficiente tolerancia para establecer sanas relaciones con sus hermanos y todos los demás.
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Un hijo sereno verá en la posibilidad que le brinden sus padres para educarse académicamente la oportunidad de ser una mejor persona, conjuntamente con la posibilidad de poder mantenerse en su vida adulta, y no una condena de hacer obligadamente algo que le resulta desagradable.
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Un hijo sereno siempre entenderá las sanas intenciones de sus padres cuando estos le indiquen sus responsabilidades y compromisos, reconociendo en estas indicaciones las fórmulas para constituirse en una persona que pueda adaptarse y tolerar las circunstancias que se le vayan presentando.
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La serenidad en la familia:
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La familia integrada por un grupo de personas que comparten un lazo sanguíneo, en la medida que procuren mantener una sana comunicación, donde la confianza permita compartir sus mutuas experiencias para resolver sus conflictos emocionales, así unidos podrán tener la gran capacidad de solucionar cualquier situación por complicada que sea, sin perder la tranquilidad, siempre serenos se constituirán en una sola fuerza con mucha experiencia acumulada para enfrentar cualquier circunstancia que se les presente. En el caso de que algún miembro de la familia llegara a perder la tranquilidad, siempre podrán los demás ayudarlo a resolver sus problemas y sabrán que hacer para que su familiar recupere su natural estado de serenidad®.
La Conciencioterapia©:
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Cuando en la familia uno o todos sus miembros han dejado de sentirse serenos, empieza a romperse la unidad familiar. El ambiente comienza a cambiar negativamente por consecuencia de discusiones inútiles y peleas absurdas, impidiendo así una posible solución al problema o a la situación. La pérdida de la serenidad obedece más a la ignorancia que a terribles factores difíciles de solucionar. La Conciencioterapia© es un conjunto de procesos únicos en el mundo que a muy corto plazo permite recuperar el natural estado de serenidad®, reorienta al individuo y lo capacita de una forma sistemática para que a la brevedad posible se reintegre positivamente a su núcleo familiar y social a través de un efectivo proceso para desarrollar la madurez emocional.
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Miles de personas de distinto género y edad, con problemas de depresión, ansiedad, miedo, pensamientos suicidas, conductas compulsivas, apatía, hiperactividad, o con una marcada inmadurez emocional, después de realizar su proceso, inmediatamente se sienten serenas para comenzar a resolver su problemática existencial.
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En estos procesos no son utilizadas sustancias, elementos sugestionantes, y mucho menos rituales religiosos o sectarios.